Las cosas por su nombre: la vulva
(Foto: Shutterstock)¡Cuánto nos cuesta nombrar los genitales femeninos externos! Utilizamos diminutivos, apelativos “biensonantes”, palabras que no nos dan tanta vergüenza como su nombre real. Lo llamamos chichi, rajita, petete, culo de delante… Tenemos miles de maneras de evitar decir su nombre y, así, se lo nombramos a nuestras hijas. A simple vista puede parecer que esta manera de denominar a los genitales femeninos externos no tiene ninguna repercusión. Sin embargo, esto no es así en absoluto. Las palabras son la herramienta básica que tenemos para construir mentalmente la realidad. Con la palabra construimos el pensamiento y hacemos reales conceptos y [...]