Seguramente, a todas nosotras, de niñas, nos han reprochado alguna vez el hecho de que quisiéramos “salirnos con la nuestra”.
Y es que, a veces, los objetivos de los niños entran en conflicto con los objetivos de los adultos. Veáse, por ejemplo, la situación del adulto que quiere que su hijo se vaya a la cama y el niño desea seguir jugando o el adulto que quiere que su hijo se abriue para que no se resfríe y el niño que no tiene frío y quiere ir en mangas de camisa.
Sin embargo, el hecho de que los niños deseen salirse con la suya, traten de lograr sus objetivos no es negativo per se. Por el contrario, es una actitud positiva y empoderante.
Por todo esto, es importante que positivicemos la manera en que interpretamos el hecho de que los niños quieran lograr sus objetivos, independientemente de qué se trate el objetivo, adoptando una perspectiva que valore esta actitud y valide el derecho del niño a desear salirse con la suya.
Es esencial que diferenciemos el hecho de que el niño quiera lograr su objetivo del hecho de que su objetivo entre en conflicto con el nuestro. En este segundo caso, tendremos que buscar la manera de resolver el conflicto de intereses, pero no negar el derecho y la validez de que el niño persiga su objetivo.
Mónica Serrano Muñoz
Psicóloga especializada en Maternidad y Crianza Respetuosa. Crecimiento personal. Acompañamiento en momentos de cambio y crisis.
Col. Núm. M26931
Consulta presencial (en Madrid) y online.
Petición de cita en: info@psicologiaycrianza.com o en el número 636 864 379.