Ellas cuentan su experiencia
La formación me ayudó a desmontar mi ideal de mamá consciente superwoman que tanto daño me estaba haciendo y que me estaba desconectando de mí y de mis hijos.
Lo hacía todo por ellos. Pero algo fallaba.
Como no llegaba al ideal que yo tenía de mamá consciente me frustraba mucho, me juzgaba sin piedad y al final siempre conectaba con la culpa.
Con Maternidad Feliz, Crianza respetada comprendí que yo también debía cuidarme, amarme, respetar mis necesidades.
Yo también debía incluirme en la crianza que quería para mis hijos, yo también tenía mis límites, mis días, mis fallos, mis errores y no siempre llegaba a todo. Y estaba bien.
Estoy descubriendo la compasión hacía mi proceso y hacia mí misma.
Hay un antes y un después de comenzar a trabajar con Mónica.
Me encanta la claridad que me aportas y cómo me señalas lo que tengo que ver de una forma abierta, clara y al mismo tiempo amorosa, y sentirme en total confianza en un espacio libre de juicios es súper valioso para mí. Todas las sugerencias que me has dado han dado justo en el clavo, han sido prácticas y fáciles de implementar y he visto resultados inmediatos en mi relación con mis hijos y conmigo misma.
Eres una joya para las madres que muchas veces nos sentimos desbordadas y no nos damos cuenta dónde nos estamos exigiendo de más.
Vivian Watson
Mentora
El valioso conocimiento de Maternidad Feliz, Crianza respetada fue la base para construir un negocio como Asesora de Crianza Consciente.
Me reconcilié con partes de mi historia y reconecté con mi esencia. Aprendí a ponerle límites a los demás y a ponerme a mí primero.
Destacaría las relaciones que se establecen entre mujeres que compartimos ideología, la profundización en la psicología que se esconde detrás de la crianza y el empoderamiento y reconciliación conmigo misma.
Antes tendía a ignorar aquello que mi corazón me decía y a dudar de mí como mamá primeriza.
Con Maternidad Feliz, Crianza respetada he aprendido a agudizar mis sentidos para escucharme más, validar mis propias emociones, confiar en mi brújula interior, ser más compasiva conmigo y tomar los errores como aprendizajes.
Es una formación muy profunda, muy completa. Me encantó encontrarme en las vivencias de otras mujeres, con quienes ahora guardo un vínculo y un cariño muy especial.
Recomendaría esta formación a las madres y las profesionales que atienden infancia y familia.
A las primeras porque encontrarán recursos muy valiosos para alivianar el camino cuando se pone tenso y difícil, porque encontrarán respuestas y alternativas a los retos que plantea la maternidad.
A las profesionales, porque es indispensable ponerse en la piel de una madre que intenta ir por el camino de la consciencia, porque es importante profundizar en los contenidos que a veces en la formación académica formal no se toman con la suficiente profundidad.
Margarita Alviar
Universo de Familias